La cancelería de aluminio es un componente esencial en la construcción y diseño arquitectónico de todo tipo de edificios, tanto residenciales como comerciales. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cuál es el ciclo de vida del aluminio?
El aluminio es un metal con propiedades únicas que lo convierten en una opción sostenible y duradera para la cancelería, con beneficios tanto ambientales como económicos. Es ideal para edificaciones debido a su ligereza, resistencia a la corrosión y su capacidad para ser moldeado en diferentes formas y tamaños.
En este sentido, el ciclo de vida del aluminio comienza con la extracción de su principal materia prima, la bauxita, una roca sedimentaria con un alto contenido de aluminio y que se encuentra en diversas regiones alrededor del mundo de forma abundante.
Australia es el mayor productor mundial de bauxita, con un estimado de 100 millones de toneladas métricas en 2022. China y Guinea ocuparon el segundo y el tercer puesto, con 90 y 86 millones de toneladas métricas, respectivamente, ese año. Fuente: Satadista
Posteriormente, mediante el proceso de extracción de bauxita, se obtiene la alúmina, un compuesto de óxido de aluminio y que se refina a través del proceso Bayer para elaborar el aluminio primario.
Para ello, se requiere un proceso de electrólisis que rompe los enlaces entre el átomo de aluminio y el oxígeno. Este proceso es intensivo en consumo de energía y requiere una cantidad significativa de electricidad. Por ello, utilizar energía renovable y mejorar los métodos de producción son medidas importantes para lograr la neutralidad de carbono en el ciclo de vida del aluminio.
De acuerdo con Stadista, la producción del aluminio en China alcanzó los 40 millones de toneladas métricas en el 2022. Esta cifra sitúa al país como el primer productor mundial, a gran distancia de la India y de Rusia, que le siguen en el ranking con 4 y 3.7 millones de toneladas, respectivamente. La producción global del aluminio se aproximó a los 69 millones.
De acuerdo con Stadista, la producción del aluminio en China alcanzó los 40 millones de toneladas métricas en el 2022. Esta cifra sitúa al país como el primer productor mundial, a gran distancia de la India y de Rusia, que le siguen en el ranking con 4 y 3.7 millones de toneladas, respectivamente. La producción global del aluminio se aproximó a los 69 millones. Fuente: Stadista
El proceso continúa con su transformación en diferentes productos, entre ellos, la cancelería de aluminio, que se refiere a las ventanas, puertas, marcos y perfiles utilizados en la construcción de edificaciones.
La extrusión, como tal, permite dar forma al aluminio mediante perfiles ya fabricados o personalizados, brindando una amplia versatilidad en su aplicación.
Finalmente, una vez que el aluminio cumplió su objetivo, llega el proceso de reciclaje, el cual requiere apenas el 5% de la energía necesaria para producir aluminio primario, lo que implica una reducción significativa en el consumo energético y las emisiones de gases de efecto invernadero.
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Importancia del reciclaje del aluminio en la construcción
De acuerdo con Reynaers, la fundación AluEco realizó un estudio sobre las propiedades medioambientales de los elementos de aluminio para fachadas en colaboración con la Asociación de la Industria de Fachadas y Ventanas Metálicas (VMRG) y la Asociación de Tratamiento Industrial de Superficies de los Países Bajos (ION).
En dicho análisis, basado en el método LCA (Análisis del Ciclo de Vida), se destaca que los perfiles de aluminio utilizados en fachadas, con recubrimiento de polvo y anodizado, tienen una vida útil de al menos 75 años, y se puede recuperar un mínimo del 95% de su contenido mediante el reciclaje.
Esto tiene implicaciones significativas para los profesionales de la construcción, Es decir, arquitectos, asesores de construcción y fabricantes pueden aprovechar este dato para realizar cálculos precisos y diseñar soluciones teniendo en cuenta las propiedades ambientales de los elementos hechos a base de aluminio.
Además, el aluminio ofrece propiedades estéticas, durabilidad, eficiencia energética destacadas y es un material sostenible, que, a diferencia de muchos otros, conserva sus características en el proceso de reciclaje, lo que le confiere una reciclabilidad infinita.
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El aluminio es, sin duda, un aliado clave en la construcción sostenible y reciclable, cuyo ciclo de vida demuestran su larga durabilidad y la capacidad de recuperar la gran mayoría de su contenido a través del reciclaje.
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