Como material de construcción, el vidrio de seguridad tiene hoy una gran demanda en proyectos arquitectónicos por sus propiedades estéticas, pero también por la tranquilidad que brindan a inquilinos y dueños de inmuebles que los usan.
Así, estos cristales pueden ser un factor de prevención ante la delincuencia ya que son muy resistentes ante fuerzas de impacto como piedras o incluso balas.
Sin embargo, entre los usuarios existen ciertas dudas en cuanto a los tipos de vidrio que califican en esta categoría, con preguntas como: “¿qué vidrio es más seguro laminado o templado?” o “¿cómo saber si un cristal es templado o laminado?”. En este artículo revisamos las diferencias y características de cada configuración.
¿Cómo saber si un cristal es templado o laminado?
Aunque estos dos tipos de vidrio se diferencian de muchas maneras, la principal forma de saber si un cristal es templado o laminado es por la forma en cómo se quiebra el vidrio.
Mientras que el templado se romperá en pequeños pedazos redondeados, el vidrio laminado se agrietará, pero permanecerá unido debido a la película plástica de PVB (polivinilo butiral) o de EVA (acetato de vinilo y etileno) intercalada entre las hojas de vidrio que lo conforman.
Como vimos en el artículo sobre resistencia del cristal templado, el proceso de producción –a alta temperatura y presión– hace que una hoja de vidrio termoendurecido sea entre 4 y 5 veces más resistente que una hoja de vidrio recocido del mismo espesor y configuración.
Además, el cristal templado no representa riesgo de corte a las personas y es más resistente a la flexión, a vientos fuertes y al estrés térmico por radiación solar, de ahí que se use comúnmente en fachadas exteriores o en lugares expuestos al tránsito (por ejemplo, junto a puertas).
En tanto, para garantizar su resistencia mecánica, el vidrio laminado requiere de un montaje de película y resina plástica que se intercala entre las hojas de vidrio recocido (2 o más). Por ejemplo, una hoja de vidrio laminado de 1/4″ de espesor se compone de dos piezas de vidrio de 1/8″, y una de 3/8″ se compone de dos piezas de vidrio de 3/16″.
Vidrio templado o laminado: ¿cuál es más seguro?
Como mencionamos al inicio, el vidrio de seguridad está teniendo una gran demanda debido a sus cualidades de prevención de accidentes y protección patrimonial. Así, tanto el cristal templado como el laminado son parte importante de esta tendencia, y cada uno aporta un nivel de seguridad distinto dependiendo de factores como:
1. Aplicación interior o exterior.
- En canceles, mamparas u otros cerramientos interiores = vidrio templado.
- Cristal en puertas y ventanas de uso comercial o residencial = vidrio laminado o vidrio templado.
- En fachadas o ventanales de edificios de gran altura = vidrio templado.
2. Enfoque del sistema.
- Prevención de entrada forzosa y robo = vidrio laminado.
- Protección ante los elementos del clima (vientos fuertes, choque térmico) = vidrio templado.
- Seguridad adicional ante roturas = vidrio templado + laminado.
3. Diseño y costo
- Colores y/o patrones impresos en el cristal = vidrio laminado.
- Sistemas arquitectónicos varios (escaleras, barandales, pisos) = vidrio templado + laminado.
- Mayor costo = vidrio laminado.
Finalmente, la elección de uno u otro tipo de vidrio dependerá de las necesidades de arquitectos y constructores, así como de la tranquilidad que estén buscando los usuarios del inmueble.
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Foto de portada: Wikiarquitectura (Carlos Alcocer by NC-ND).
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